La historia detrás de la copa Nick & Nora

Ahora bien, ¿qué relación tienen Nick & Nora con la copa de Martini en cuestión? Pues, es en 1987 cuando Dale DeGroff, un famoso bartender estadounidense fue contratado por Joe Baum para estar a cargo del bar del restaurante neoyorkino recientemente abierto, Rainbow Room. Allí, DeGroff comenzó a escoger la cristalería que encajara con el estilo de sus creaciones y fue en busca de “La copa de cóctel como la que aparece en las películas ‘The Thin Man’ donde Nick y Nora servían sus Martinis”. Minners Design le envió un catálogo del año 1930 advirtiéndole que si encontraba la copa que buscaba, tendría que hacer los moldes nuevamente ya que dicho catálogo era muy antiguo y todos los artículos estaban fuera de producción hace mucho tiempo. Pero DeGroff logró dar con el cristal deseado. Dentro del catálogo se hallaba un pequeño vaso llamado “Little Martini”, una copa de tallo largo y boca estrecha, con escasa capacidad paro con mucha elegancia. el cual fue el elegido para protagonizar sus mejores creaciones en la barra de Rainbow Room y cada vez que Dale DeGroff reordenaba la copa, se refería a ella como “el vaso de Nick y Nora” y todo el personal de Minners sabía bien que se trataba de Little Martini. Al cabo de alguno años Minners vendió muchos de sus artículos, entre ellos se encontraba la tan deseada copa, a Steelite, un fabricante mucho más grande. Cuando Seelite lanzó su nuevo catálogo con la copa incluida, la nombraron Little Martini Nick & Nora.

Nick & Nora más allá de la elegancia

Para aquellos aficionados y expertos de la coctelería, la copa Nick y Nora no sólo se limita a ser una copa con un buen diseño. Su pequeño tamaño y con una cavidad mucho más estrecha y paredes rectas en comparación con la copa de Martini tradicional, permite que los sabores de cada cóctel se acentúen, mejorando el resultado final. Además, al tener menor superficie, el contacto entre el líquido y el aire, el trago se mantiene fresco durante más tiempo y, por supuesto, son vasos menos propensos a derrames que una copa de Martini de cuello ancho.

Sin lugar a dudas, esta copa aporta distinción, gusto y belleza a la presentación de cualquier cóctel y además, es una copa con una increíble historia detrás de su sutil y excitante nombre.