Con raíces italianas

Nada encorsetado. Los espacios invitan a ser vividos, habitados. Todo encaja, todo es equilibrado y, al mismo tiempo, nada es demasiado rígido. Si este estilo mediterráneo con aires bohemios causa siempre furor en hogares, hoteles y restaurantes, imagínate lo fascinante que es ambientar un evento de la misma manera, donde se pueda jugar con cada detalle. Puedes recrear una boda rústica en la Toscana o una cena importante al mejor estilo siciliano sin importar donde te encuentres, gracias a las claves de decoración que vamos a revelar a continuación.

Materiales

La arruga de los textiles que se deja ver, la combinación de hierro y maderas, los tejidos y algo de fibra son quienes dan la estructura escenográfica con una sútil elegancia y son el reflejo idóneo de un ambiente de tendencia mediterránea. A la hora de montar todo para un gran evento, recomentamos utilizar mesas grandes y largas de maderas claras y bancos haciendo juego que sean fáciles de desmontar, además de ser resistentes a la intemperie. Una vajilla sencilla de porcelana en colores lisos acompañará perfectamente, sin olvidar combinarla con una cristalería clásica o vintage.

Colores

Italia está rodeada por un derroche de colores: esmeralda, tonos azules del mar, la piedra arenisca gris que se vuelve cálida a la sombra de una rica vegetación, cítricos amarillos y naranjas… En tal entorno de color, una amientación brillante es innecesaria. Los tonos naturales como blanco, beige y colores claros como amarillo suave, son un punto clave para acentuar el estilo. El contraste entre la paleta de verde, azul, blancos siempre será un gran match a la hora de combinar la vajilla con la mantelería. Son los colores con los que sin dudas acertarás.