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Un plato de postre es un plato llano de porcelana, gres o vidrio que se utiliza para postres. No existe un único plato de postre, sino muchas variantes del mismo.
Cuando se piensa en un plato de postre (especialmente en restaurantes), también se piensa en el tipo de postre que se va a servir al cliente y se intenta elegir un plato que realce el contenido.
En tamaño y estilo, el plato de postre es similar a un plato de fruta o de pan o a un plato que contiene un pastel.
Un plato de postre destinado a un restaurante u hotel es diferente de los que se utilizan para uso doméstico.
Están fabricados en porcelana de hostelería de alta calidad y, por tanto, son ideales para el uso intensivo característico de la restauración.
Dependiendo del diseño, los platos de postre varían en diámetro de 15 a 30 centímetros.
Los platos de postre clásicos tienen un diámetro bastante pequeño, de 15 a 21 centímetros, y son típicos sobre todo en hoteles.
Los restaurantes modernos, en cambio, prefieren platos de postre más grandes, de hasta 30 cm. Hay platos de postre sin borde, pero también platos de postre con unborde muy ancho, que son muy escénicos y estéticamente agradables.
Nunca es fácil saber qué plato es el más adecuado para presentar un determinado tipo de postre, y no existen directrices que le ayuden a elegir.
Tienes que confiar en tu gusto personal, pero ten en cuenta que hay algunos pequeños detalles a los que puedes prestar atención: